Cultiva buenos hábitos en primavera

el hígado y vesícula biliar florecen en primavera como las flores

En la ancestral sabiduría oriental, al movimiento emergente y ascendente que deviene del movimiento flotante y profundo del invierno se le llama energía árbol o energía madera, y se asocia con el hígado y vesícula biliar.

Es la energía que la naturaleza despunta, brota y germina. Afecta a todo ser viviente, plantas, animales, humanos.

Este movimiento que emerge creativo, que tiende a desenvolverse en el espacio proyectándose con ímpetu como los primeros retoños verdes en los campos y jardines, también emerge en nuestro interior y puede ser extasiado y pletórico o colapsado y castrado dependiendo del estado de nuestro hígado y vesícula biliar, órganos que representan la primavera en nuestro cuerpo.

Para sintonizar con la alegre danza exterior que se manifiesta en toda la gama de verdes, brotes y bayas en la naturaleza; el hígado y la vesícula deben permitir el viaje de este flujo árbol que ocurre a lo largo de la parte derecha del cuerpo subiendo desde la pierna.

Este flujo se detiene o colapsa si no hemos eliminado toxinas, grasas, o energía pesada del invierno, manifestándose en el humano con un carácter agrio, irritable, en algunos casos irascible, frustrado y agresivo. Por esto la primavera en todas las culturas es conocida como la época de depuración.

Un flujo fluido de energía árbol a través del hígado y vesícula biliar representan tolerancia, paciencia, resistencia, visión clara, entusiasmo, constancia, flexibilidad, capacidad de adaptación y alegría.

Ayudar al hígado y vesícula biliar a depurar para sintonizar con la danza emergente en la naturaleza es sencillo y muy positivo

  • Evita comer en exceso incluso alimentos adecuados; evita alimentos con grasas saturadas, alimentos cárnicos, aves, huevos y lácteos.
  • Deja de lado los azúcares simples incluyendo la miel, bollería, zumos y harinas refinadas.
  • Cuida también el consumo inadecuado de sal especialmente sal refinada, químicos y sustancias artificiales.
  • Elige comer cereales integrales, es un buen momento para descubrir la cebada, verduras de estación, bayas y frutillas de temporada, germinados, legumbres, fermentos, incluye una buena cantidad de hojas verdes en cada comida con un pequeño toque ácido (gotas de limón, manzana verde), sabor que estimula los órganos de primavera. Es el momento del apio, rábanos, ajos tiernos, cebolletas, cebollinos.
  • El hígado quiere descanso, las cenas tarde, el estrés, la presión familiar o laboral, el exceso de calor, la ropa sintética, el uso prolongado de ordenadores y la TV, son también factores externos que afectan.
  • Caminar especialmente a primera hora de la mañana, si es posible descalzo sobre la yerba aún húmeda, nos conecta naturalmente con la infinita manifestación creativa de esta estación.