“Reconocer todo lo bueno que ya tienes en la vida es la base de la abundancia”. Eckhart Toll
Claves para crear abundancia
- Quien vive en la actitud de escasez puede tener toda clase de bienes, pero siempre pensará que algo le falta.
- Quien se compara está constantemente emergiendo y nada le es suficiente, siempre tendrá la sensación de no tener y ese afán por tener y trepar, le puede llevar al derrumbamiento de lo que ya tiene.
- Quien vibra en el egoísmo evita hacer favores y servir, quien no sirve a los demás no se sirve a sí mismo/a y hace infértil su vida, quizás la mayor expresión de pobreza acompañada de su amiga la frustración.
- Quien cultiva el papel de víctima, siempre tendrá la sensación de no tener o mejor dice que no tiene, te hace creer que no tiene, te insinúa entre dientes que no tiene y en medio de cualquier conversación sacará a relucir “no tengo lo suficiente”, porque así obtendrá una ganancia, o cree tenerla.
- Quien retiene lo que tiene diciendo “me fue bien pero …”, ese “pero” lo empobrece, ese “pero” está esperando obtener una consideración, que a su vez es una forma de no comprometerse y trae como consecuencia pobreza e infertilidad. La pobreza no se expresará solamente en cuanto a los bienes materiales, se extiende a la pobreza emocional y espiritual, donde se confunden el pasotismo emocional, frialdad y falta de cooperativismo, tan esencial en los tiempos que corren, con un “tú a tus asuntos y yo a los míos”, se pierde la perspectiva de lo humano, endureciendo la ternura interna.
Existen varias claves para generar abundancia y libertad económica, pero sin duda la gratitud es la base.
Gratitud, no solamente hacia las personas que nos han dado (padres, profesores, familia, amigos), sino la más importante, gratitud hacia todo lo que posees, gratitud sin “pero”. El «pero» es un prefijo que anula la acción de la gratitud y la empobrece. Como cuando alguien dice “sí, estoy muy agradecida a mi amiga, PERO …, este pero te convierte en víctima, es reductor y anulador.
El “sí pero” debería eliminarse de nuestro vocabulario. Cuando agradecemos, la gratitud es como una semilla que germina y multiplica, esta gratitud ha de ser de corazón, agradecer de verdad, sentir la satisfacción y la alegría de lo que tienes para crear abundancia de manera continuada.
Cuando agradecemos soltamos y en este soltar potenciamos, cuando no agradecemos retenemos y apretamos que es una acción limitante. Es como esconder para que nadie te vea disponer de tu abundancia y aparentar que no se tiene para obtener algún beneficio. Esta es también una forma de mentir que tiene su cuna en el miedo. La acción de los limosneros ricos que acumulan bienes en su pobreza.
En el reino vegetal, las semillas muestran su agradecimiento, germinando sin peros, y cuando nos han entregado su grandeza en sabores, texturas y formas, en nutrientes y delicias, entonces ya en el ocaso cuando podrían expresar cansancio e infertilidad, porque todo lo han dado, se espigan y nos dan más semillas para seguir dando, para crear abundancia, para honrar sus vidas.
Una de mis máximas es “todo lo que no se da se pierde” este es el mensaje de la generosa naturaleza.
La gratitud que no es otra cosa que sentir la gracia divina en ti, gracias, gracias, gracias, es conectarte con todo lo bueno que te está sucediendo, y que tu no ves porque estas conectándote con lo que deseas y crees no tener.
Es reconocer todo lo bueno que recibes en tu vida y valorar el apoyo que te dan otras personas, con humildad y amor. No se trata de sentirte comprometido, pero si de decir, gracias, gracias, gracias. Las gracias se multiplican en más.
Porque agradecer nos lleva a focalizarnos en todo lo bueno que tenemos y sentir alegría por ello. Acumular agradecimientos es la cuenta bancaria más prospera, y por favor no encuentres peros, no digas “ doy gracias porque es lo que toca pero la verdad es que lo estoy pasando mal porque no tengo”. Esta frase anula todo lo demás, ¿de verdad no tienes?.
Para crear abundancia, hemos de agradecer. El agradecimiento genera emociones positivas y felicidad, tanto a quien las da como a quien las recibe, pues la palabra “gracias” tiene una altísima vibración y es una de las mas importantes expresiones de amor.
Cuando agradecemos sentimos que tenemos abundancia y que estamos recibiendo, cuando te agradecen sientes que lo has hecho bien, además nos mantiene en el presente, manteniendo el foco en lo positivo de manera que atraemos más situaciones gratificantes a la vida.
Porque agradecer no es otra cosa que decirle al universo “soy consciente de que mis circunstancias actuales son fruto de mis propios pensamientos, sentimientos y creencias”, y esto nos convierte en co-creadores responsables de nuestra vida, de una manera muy creativa.
Elegimos entre dos caminos, focalizarnos en lo que nos gusta para disfrutarlo y atraer más de lo mismo, o quedarnos en la queja, el murmullo y el victimismo …
Crear abundancia desde lo orgánico y la nutrición
Aunque este texto parezca una oda a la gratitud, te voy a dar pautas para desde lo orgánico y la nutrición contribuir a que generes abundancia, pero primero hemos de entender que la gratitud es más que una emoción, es una tendencia a ver lo bueno que nos trae cada día la vida.
Es una actitud, y para estar agradecidos primero hemos de darnos cuenta, de ser conscientes de lo que tenemos, porque a menudo damos por sentado que lo que tenemos es un derecho, que debería estar ahí y nos centramos en lo que no tenemos o en los desafíos de la vida y en como deshacernos de los desafíos.
La gratitud conlleva inherentemente efectos positivos en nuestras vidas.
- Aumenta la autoestima y el valor como personas.
- Nos lleva actuar de acuerdo a nuestros valores.
- Ayuda a crear vínculos tiernos y honestos con los demás.
- Contribuye a que mejoremos las relaciones.
- Nos ayuda a gestionar el estrés y los desafíos.
- Cambiamos la sensación de “tenemos problemas”, por desafíos.
- Inhibe el que surjan las comparaciones con otros o con otras circunstancias.
- Cuando no nos comparamos, sentimos verdadera alegría por los triunfos de los demás y gratitud por lo que ellos han conseguido para ellos.
- Agradecer contribuye a que nos adaptemos a los cambios y nuevas circunstancias con alegría. Combate también las sensaciones negativas.
La gratitud se puede expresar de múltiples maneras, y en múltiples ocasiones podemos sentirnos agradecidos muchas veces a lo largo del día, por la vida que nos viene cada amanecer sin que la llamemos, también por las pequeñas cosas que nos suceden en lo cotidiano, agradecer a las personas cada detalle o favor que te hagan y también agradecerles por ser parte de tu vida, agradecer por que te escuchan cuando tienes dificultades así como escuchar con gratitud cuando tus amigos o familia te comparten sus dificultades.
Por supuesto que hay una correspondencia con la condición de nuestros órganos, lo que comemos y lo que expresan.
Recientemente los científicos han afirmado lo que desde la macrobiótica venimos diciendo desde siempre, “en los intestinos está nuestro segundo cerebro”, pero no es exclusividad de los intestinos el que se corresponda con el cerebro, que tenga inteligencia análoga y sentimientos, cada órgano tiene inteligencia y resuena con una cualidad emocional e intelectual.
Los intestinos
Están asociados a generar abundancia y materializar, con lo que deberían estar limpios de toxinas y alimentos que les impidan la evacuación, cuando una persona sufre de estreñimiento le es muy difícil soltar, se acumulan residuos tóxicos, la energía se estanca, la energía en todos sus aspectos.
De igual manera cuando una persona no tiene buena absorción de minerales, especialmente hierro, cuando no genera hierro magnético, de donde deviene el magnetismo, no tendrá suficiente fuerza de materialización. Para lo que es muy importante cuidar el intestino delgado teniendo ritmo en las comidas y que estas tengan buen aporte de minerales evitando los alimentos y sustancias detractoras del hierro, calcio y magnesio.
El bazo
está relacionado con la compasión, la satisfacción y la gratitud, una parte importante de la gratitud conectada con el bazo es cuidar de todo lo que tenemos, cuando nos olvidamos de las cosas que poseemos, cuando descuidamos nuestras pertenencias, las pertenencias y los objetos nos abandonan, y la pobreza se instala.
A nivel emocional cuando el bazo y el páncreas no funcionan adecuadamente, pueden expresar celos, envidia y transmitirnos una sensación de escasez, de esta manera evitamos sentir y crear abundancia.
Los riñones
Son la cuna de la fuerza de voluntad, del coraje y la creatividad, han de mantenerse calientes y bien nutridos o de lo contrario nos poseerá el miedo, la falta de fuerza de voluntad, la baja autoestima y la falta de gratitud.
El hígado
Nutrido adecuadamente nos conduce a explorar nuevos caminos, a caminar con paciencia y gratitud sin perder el rumbo, pero si están nutridos por sustancias dañinas, generaremos conformismo, frustración, y rabia.
El corazón
Es compañero del intestino delgado manteniendo un compas vital, quiere ritmo y no quiere alimentos extremos, nutrido adecuadamente expresa alegría y ritmo en nuestras vidas, amor por todo lo que tenemos, infinita gratitud hacia la existencia propia y la de los demás. El sentimiento que genera es esencial para crear abundancia.
Cómo podemos crear abundancia y gratitud, a partir de lo que comemos y de las emociones
En cuanto a la comida
- Elimina, todos los alimentos refinados y grasos que generan estreñimiento.
- Incluye en tus comidas cereales integrales en grano como base de todas las refracciones.
- Mastica con gratitud cada bocado de comida.
- Elimina de tu alimentación, los azúcares simples, los lácteos y líquidos viscosos que entorpecen el buen funcionamiento del bazo.
- Toma alimentos dulces naturales que generan dulzura, compasión y gratitud, como verduras dulces, frutas de temporada, en esta estación del otoño preferiblemente cocinadas.
- Evita todos los alimentos que enfrían tus riñones y mermen tu vitalidad y te pueden llevar a ser presa del miedo.
- Toma potajes de legumbres, los azukis son una legumbre pequeñita que nutren los riñones.
- El hígado es un órgano con una temperatura más alta el que el resto de los órganos, para que nos transmita paciencia no lo sobre cargues con alimentos calientes, como carnes, embutidos, bollería, muchos fritos, grasas saturadas, alcohol.
- Nutre las funciones del hígado con alimentos que refresquen sin enfriar, como las verduras verdes, que en esta estación del año es más adecuado prepararlas en hervidos ligeros, vapor o escaldados.
- Para el buen funcionamiento del corazón evitamos las grasas saturadas, los alimentos extremos, los excitantes, estimulantes y todo lo que nos lleve a perder el ritmo.
- Un poco de sabor amargo, proveniente de las semillas de sésamo, algas nory, achicorias, hojas verdes grandes, maíz, tonificarán el corazón llevándole a expresar amor incondicional.
La gratitud la podemos cultivar con diferentes acciones, con ello también cultivamos la abundancia
- Cuida y valora todo lo que tienes, cuando olvidamos constantemente nuestras pertenencias o las perdemos, las pertenencias también nos abandonan, el mensaje a la naturaleza es de descuido, derroche, desaprovechamiento.
- Utiliza el pensamiento creativo, recuerda algún momento de tu vida en el que te dieron una agradable sorpresa, un amigo, pareja o familiar, recuerda con detalle donde estabas, que personas te rodeaban, revívelo con gratitud y alegría.
- Escribe en una agenda cada día las cosas positivas que te han pasado y te darás cuenta que son muchas y así no te centras en las que tú consideras negativas, así serás más consciente de las cosas por las que puedes estar agradecida.
- Antes de acostarte cada noche, agradece unos segundos todo lo que tienes, incluyendo la posibilidad de estar vivo y la vida de tus hijos y seres que amas.
- Escribe una carta de gratitud a una persona a quien te sientas agradecida, no tienes que enviarla aunque si la envías se multiplicaran los efectos positivos en ti y en esa persona.
- Ponte de acuerdo con alguna amiga o conocido para practicar la gratitud, y contarse cosas buenas y felices. Es importante escuchar a la otra persona sin peros ni interrupciones y sentir su alegría y gratitud, alegrándose de corazón por la otra persona.
- Expresa personalmente con amabilidad y gratitud el agradecimiento por todos los detalles que tienen contigo todas las personas, amigos familiares, padres, hijos, pareja, desconocidos, comprueba el efecto que tiene en tu vida.
- Cada día sirve incondicionalmente a tus semejantes, como dice la Biblia, la caridad comienza por casa. Nota como cultivando la vocación de servicio experimentas de forma automática la grandeza de la gratitud.
- La gratitud es un sentimiento sublime, elevado y amoroso, lo puedes sentir caminando por la calle, al contemplar el atardecer. Cuando surja conéctate a él, deja que te invada, que te recorra el cuerpo. Quédate impregnada de este sentimiento para evocarlo frecuentemente.
- Agradece porque hace sol, porque llueve, porque hace aire, agradece porque te han complacido con algo que esperabas, agradece cuando no sucede lo que esperabas, seguramente la vida te estaba protegiendo. Agradece las dificultades, porque te ayudan a conocerte más y a crecer.
- Agradece a las virtudes de otros porque te enriquecen y fortalecen, agradece todo lo que has recibido hasta ahora en tu vida, lo que estas recibiendo hoy y lo que está por llegar en tu vida para que se manifieste.
Para crear abundancia, convierte la gratitud en tu religión, gracias, gracias, gracias.
Convierte el servicio en tu profesión y se manifestará la gratitud auténtica.
Agradece tu existencia y te sentirás vivo.
Agradece todo lo que tienes y te sentirás abundante y próspero.
Cada mañana eleva una plegaria con la poderosa palabra “gracias”.